Nosotros

¿En Qué Creemos?


Creemos en los poderes mágicos de unos seres que cada día nos regalan una enseñanza: los caballos. Junto a ellos, con ellos y a través de ellos aprendemos a respetar, comunicarnos, amarnos y descubrir nuestro potencial para sanar nuestro cuerpo, alma, mente y corazón, alimentando nuestra valentía en medio de sonrisas y nuevos retos.

La humildad con la que nos acercamos a los caballos para sacarlos de la pesebrera, el cuidado con el que los rasqueteamos y les peinamos la cola, la concentración con la que los ensillamos, el dominio con el que nos montamos, la confianza con la que los lideramos, la visión con la que elegimos hacia dónde ir… Cada elemento con el que formamos un vínculo con ellos nos deja una enseñanza para la vida.

Por eso somos una escuela con maestros de cuatro patas en la que, mientras aprendemos a entenderlos, escucharlos, montarlos y caminar juntos, la lección más grande que tenemos es sobre nosotros mismos.

“Nuestros maestros de 4 patas


Sonora La Bonanza Medellin

Sonora, 15 años


Zaina y de paso fino, esta yegua es una de las fundadoras de La Bonanza. Comenzó a dictar clases desde el primer día que abrimos. Es profesora desde sus 3 años y su docilidad sale a flote cuando tiene a un niño en su lomo.

Princesa La Bonanza Medellin

Princesa, 13 años


Paciente, segura, tranquila y serena, es una de las mejores terapeutas que tenemos. Su energía es capaz de calmar miedos y ansiedades, escuchar deseos y acompañar procesos a través de sus pasos, trote y galope.

Paloma La Bonanza Medellin

Paloma, 12 años


Esta yegua escucha lo que cada alumno necesita, por eso dicta clases en todos los niveles: básico, medio y avanzado. Perceptiva, ágil y franca al andar, esta mora de paso fino colombiano ha llegado a competir junto a nuestros campeones.

Diosa La Bonanza Medellin

Diosa, 12 años


Nuestra mejor instructora para aprender a galopar. Su suavidad y precisión al momento de hacer las transiciones le enseña a niños y adultos cómo dar órdenes con el cuerpo de forma confiada y segura. Castaña, noble y delicada.

Astrología La Bonanza Medellin

Astrología, 4 años


Su suavidad y precisión al momento de hacer las Polifacética e integral, nacida, criada, arrendada y pulida en casa. Esta yegua de paso fino sí que sabe adaptarse: nos acompaña en estimulación temprana, equinoterapia, primeras clases y competencias de alta exigencia.

Cumbrea La Bonanza Medellin

Cumbre de la Luisa, 16 años


Un gran ejemplo de lo que significa ser instructora: detecta de una manera ejemplar cada una de las situaciones en las que se encuentra y asume con nobleza su rol, su brío y sus requerimientos dentro de cada proceso.

Andromeda

Andrómeda San Martín, 8 años


Madre de Astrología, es la yegua ideal para aprender la primera norma esencial de montar a caballo: la suavidad en las manos. Esta yegua de color alazán enseña sobre la paciencia, el manejo de las riendas y la docilidad de la vida.

Mantequilla La Bonanza Medellin

Mantequilla, 8 años


Su andar y comportamiento acompañan a nuestros alumnos a desarrollar destreza, postura adecuada y uso de ayudas. Los niños la aman porque, además de su nombre divertido, tiene un talento secreto: ¡desatar los nudos para escaparse y así crear momentos de risas!

La Bonanza medellin yeguas

Además…


Como ellas, más de 20 instructores de cuatro patas conforman nuestro equipo de maestros. Cada uno, con su brío, color, sensibilidad y temperamento, nos da lecciones de chalanería y de vida.


“La magia, la empatía y el respeto comienzan desde el primer contacto que tenemos con nuestros maestros de cuatro patas”

Nuestro Manifiesto


Hoy nos abraza un presente en el que tanto nosotros como nuestros hijos estamos más conectados a la tecnología que nunca: tablets, clases virtuales, juegos on-line, videollamadas… todo a nuestro alrededor se ha reinventado para que, desde cualquier lugar y en cualquier momento, podamos encender un dispositivo y acceder a otros universos. Pero, ¿qué tan conectados estamos con nosotros mismos y con nuestro entorno?

En La Bonanza creemos en que la real conexión con lo que somos y lo que nos rodea habita en lo esencial, ese lugar cálido que queremos potenciar de la mano de nuestros maestros de cuatro patas: activando de nuevo los sentidos, escuchando los latidos mutuos, reconociendo nuestros miedos y enfrentándolos entre pasos que sanan, cultivando la confianza a través del contacto, ensuciándonos de tierra y regresando a las raíces, comunicándonos sin palabras, cerrando los ojos para vivir el momento, sintiendo cada huella, disfrutando el olor de trabajar juntos, empoderando nuestros cuerpos e imaginando sin miedo el futuro que soñamos.

Volver a lo esencial: esa es nuestra apuesta, esa es nuestra bonanza

La Bonanza escuela de chalaneria y equinoterapia medellin colombia

Nuestros pasos / Historia

Desde pequeños, Maria Fernanda Sánchez Guzman y Rubén Dario Salinas Bermudes conocían el poder, el goce y la humildad que implicaba estar en el lomo de un caballo. Sus vidas, siempre rodeadas por el amor y pasión por estos animales, se cruzaron en junio de 2013.

¿El resultado? Los 27 años de experiencia dictando clases de chalanería de Rubén Darío sumados a la estructura y visión de emprendimiento de María Fernanda le dieron vida a La Bonanza, un lugar que sueña con formar nuevas generaciones conectadas con su entorno a través del amor, el respeto, la disciplina y la aventura.