Durante años soñamos con un lugar campestre en el que pudiéramos escuchar el bramar de las vacas y los pájaros en las tardes, pero que estuviera conectado con la ciudad; un espacio amplio y seguro rodeado de animales de granja, pero al que fuera fácil de acceder; un refugio para nuestros alumnos en el que el tiempo pasara al ritmo del sol y el rocío, pero que a la vez se adaptara al ritmo de sus actividades diarias. Y lo encontramos, lo cultivamos, lo construímos y hoy es nuestra sede.
Te esperamos en la Transversal de la Montaña vía El Escobero, Envigado.
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